El delgado tabique que separa la alegría de la tristeza

Invito a los buscadores de un ocio cultural cercano y atractivo a acercarse a cualquiera de los muchos rincones teatrales que oculta Madrid, donde todos los días se ofrece una nutrida cartelera a la altura de todos los gustos... y bolsillos. Los numerosos teatros públicos y privados de la capital se complementan con una amplia red de salas independientes que completan la rica oferta teatral madrileña y convierten a esta ciudad en un punto de referencia, tanto nacional como internacional, para los amantes del arte dramático. En el castizo y hoy céntrico barrio de Embajadores, rodeado de otras salas alternativas, se encuentra el pequeño Teatro Lagrada , un reducido y acogedor espacio al que anoche acudimos para presenciar Los hombres tristes , texto de Juan Jiménez Estepa presentado con anterioridad en esta misma sala y que no queríamos dejar de ver antes de que se retirara de nuevo de escena. La decisión fue más que acertada. Y aquí dejamos nuestro testimonio para qu...