Las sombras acechan en un incierto camino de "Baldosas amarillas"...

Todos seguimos una senda invisible trazada con nuestros propios pasos. Todos buscamos ese camino que conduzca nuestro cuento, nuestra historia, hacia un final feliz. Un camino de baldosas amarillas se ofrece a nuestro paso, como el que Dorothy, la joven e inocente protagonista de El mago de Oz , debe recorrer para regresar a casa, a la libertad, a la inocencia perdida... Esta metáfora se ofrece más acuciante y extrema que nunca en el sórdido contexto en que Sandra Pedraz Decker sitúa la acción de Baldosas amarillas , la nueva pieza dirigida por Ramón Paso que, desde el pasado 9 de junio, se representa todas las semanas en la sala Lola Membrives del Teatro Lara , en Madrid. De nuevo Paso ha sido capaz de, reduciendo al mínimo -tan solo unas sillas de color amarillo en escena- los elementos escenográficos, anulados en este caso por completo, y volcando todo el atrezo espacial en una siempre sugerente y estimulante ambientación musical, arrastrarnos a su peculiar imaginario ...